miércoles, 3 de febrero de 2010

No puedo dormir...



Llevaba intentando dormir más de media hora...intentaba dejar la mente en blanco, alejarse de los ruidos y la claridad que la rodeaban. No pensar que en menos de una hora debería volver a ponerse en pie para seguir con el ritmo frenético que llevaba en las últimas semanas.
Cuanto más intentaba relajarse más recuerdos venían a su mente. Se sentía sola y con frío, en un lugar extraño. La manta que la cubría no podía hacerle sombra a los brazos que antaño la rodeaban para dormir. La nostalgia de su aliento en la nuca, el tic tac de su pulso meciendo su cuna, el calor de su cuerpo alimentando el suyo.
Cuando dormían juntos eran como siameses, encajaban a la perfección.
Ella apoyaba sus pies en los de él, dejaba que la rodeara fuertemente, se acomodaba en su regazo y se dejaba llevar por su respiración, por la calma de su latir.
Era imposible conciliar el sueño sin él.
Daba media vuelta e intentaba disipar esos pensamientos, intentaba no hacer caso de los ruidos de fuera, cerraba fuertemente los ojos y deseaba dormirse para que pasara el tiempo lo más rápido posible.
Y ahí estaba él de nuevo, su mirada cansada, su suavidad, su sonrisa de medio lado... le hacía gestos para que se tumbara a su lado, y ella no podía resistirse, necesitaba descansar y sólo podía hacerlo a su lado...
Sonó el despertador, lo apagó malhumorada y se puso en pie. Hay que continuar con el ritmo...deja de soñar...

1 comentario:

Unknown dijo...

Ella podría estar a su lado si es su deseo. Saludetes.